La música progresiva es un género que se caracteriza por su complejidad y por la combinación de distintos estilos musicales. Uno de los elementos clave de la música progresiva son los acordes de treceavos, que aportan una gran riqueza armónica a las canciones. En este artículo exploraremos el papel de los acordes de treceavos en la música progresiva, analizando algunos ejemplos y explicando cómo se utilizan para crear sonidos únicos y complejos.
Antes de adentrarnos en el papel de los acordes de treceavos en la música progresiva, es necesario entender qué son. Los acordes de treceavos son acordes que incluyen la séptima, novena, undécima y decimotercera notas de una escala musical. Estas notas se añaden a un acorde básico (generalmente una tríada o un acorde de séptima) para crear un sonido más complejo.
Por ejemplo, un acorde de treceavos en la tonalidad de Do mayor estaría compuesto por las notas Do, Mi, Sol, Si, Re y Fa# (la tercera, quinta, séptima, novena, undécima y decimotercera notas de la escala de Do mayor). Este acorde incluye notas que no están presentes en un acorde de tríada o de séptima normal, lo que lo hace más rico y complejo.
Los acordes de treceavos son muy utilizados en la música progresiva gracias a su complejidad armónica. La música progresiva se caracteriza por su fusión de distintos estilos musicales, y los acordes de treceavos permiten a los músicos crear sonidos únicos que mezclan elementos de distintos géneros.
Además, los acordes de treceavos permiten a los músicos explorar diferentes posibilidades armónicas. En lugar de limitarse a utilizar acordes básicos, los músicos pueden crear progresiones armónicas más interesantes y complejas utilizando acordes de treceavos. Esto les da más libertad creativa y les permite crear canciones que se diferencian de las convencionales.
Un ejemplo de la importancia de los acordes de treceavos en la música progresiva es "Close to the Edge" de la banda inglesa Yes. Esta canción es un ejemplo clásico de música progresiva, y utiliza constantemente acordes de treceavos para crear una atmósfera compleja y rica.
En esta canción, el tecladista Rick Wakeman utiliza acordes de treceavos para crear progresiones armónicas interesantes y complejas. Por ejemplo, en la introducción de la canción utiliza un acorde de treceavos en la tonalidad de G mayor que incluye las notas Sol, Si, Re, Fa, La y Do# (la séptima, novena, undécima y decimotercera notas de la escala de G mayor). Este acorde es muy complejo y le da a la canción una sensación de misterio y exploración.
En el puente de la canción, Wakeman vuelve a utilizar acordes de treceavos para crear una progresión armónica que mezcla elementos de distintos géneros. Esta progresión incluye un acorde de treceavos en la tonalidad de C# menor que incluye las notas Do#, Mi, Sol#, Si, Re y Fa# (la tercera, quinta, séptima, novena, undécima y decimotercera notas de la escala de C# menor). Este acorde es muy disonante y crea una sensación de tensión en la canción.
Otro ejemplo de la importancia de los acordes de treceavos en la música progresiva es "The Musical Box" de Genesis. Esta canción es un ejemplo clásico de la música progresiva de los años 70, y utiliza acordes de treceavos para crear una atmósfera compleja y misteriosa.
En esta canción, el tecladista Tony Banks utiliza acordes de treceavos para crear progresiones armónicas interesantes y complejas. Por ejemplo, en el estribillo de la canción utiliza un acorde de treceavos en la tonalidad de G# menor que incluye las notas Sol#, Si, Re#, Fa#, La y Do (la tercera, quinta, séptima, novena, undécima y decimotercera notas de la escala de G# menor). Este acorde es muy disonante y crea una sensación de tensión en la canción.
En el puente de la canción, Banks vuelve a utilizar acordes de treceavos para crear una progresión armónica que mezcla elementos de distintos géneros. Esta progresión incluye un acorde de treceavos en la tonalidad de F# menor que incluye las notas Fa#, La#, Do#, Mi, Sol, Si y Re# (la tercera, quinta, séptima, novena, undécima, decimotercera y séptima bemol notas de la escala de F# menor). Este acorde es muy complejo y le da a la canción una sensación de misterio y exploración.
Los acordes de treceavos son un elemento clave de la música progresiva gracias a su complejidad y su capacidad para crear sonidos únicos y complejos. En este artículo hemos explorado el papel de los acordes de treceavos en la música progresiva, analizando algunos ejemplos y explicando cómo se utilizan para crear atmosferas interesantes y complejas. Si te interesa la música progresiva, no dudes en explorar más sobre los acordes de treceavos y sus posibilidades en la creación musical.